Una gran polémica ha desatado la decisión de la Seremi de Educación de Valparaíso con respecto a suspender las clases en 27 recintos educacionales de la comuna porteña debido a la Cuenta Pública, que se desarrollará este jueves en el Congreso Nacional.
Esta medida afecta a colegios públicos, particulares subvencionados y particulares pagados, y fue adoptada por la autoridad tras una solicitud de carabineros, con el motivo de facilitar el despliegue policial en las inmediaciones del Congreso.
En esa línea, la decisión generó diversas reacciones y críticas entre los parlamentarios, como el diputado Tomás Lagomarsino, quien declaró que “me parece fuera de lo razonable que se hayan suspendido las clases en 27 establecimientos educacionales”. También agregó “que se puedan tomar las medidas para paliar esta suspensión de clases, que se recuperen dichas jornadas y que las colaciones de Junaeb sean distribuidas”, afirmó el diputado.
A esto se suma los dichos del Core Manuel Millones quien calificó la medida como “un exceso”, asegurando que “la Cuenta Pública es un acto republicano muy importante, pero no puede transformarse en un problema para la ciudad. Nadie mitiga o compensa el día sin clases”.
Es por ello, que proponen revisar la fecha de las futuras Cuentas Públicas y sugirió reprogramarlas para el primer sábado de junio, de esta manera, se pretende que la situación no pueda entorpecer en las actividades académicas en un futuro.
Asimismo, el Colegio de Profesores de Valparaíso avaló la decisión e incluso apoya que la medida se amplíe a toda la comuna, pues argumentan que la Cuenta Pública provoca distintos conflictos en el área de transporte.
