La jornada de este lunes, personal del Control del Orden Público (COP) de Carabineros logró desalojar la denominada “Toma VIP de Arica”, ubicada en el humedal del Río Lluta. Esto, en medio de las protestas de las familias que llegaron hasta la zona para evitar la destrucción de estas viviendas.
Hay que recordar que el terreno de 160 hectáreas fue tomado durante la pandemia, sin embargo, durante el último año las casas de mayor valor se levantaron. En su mayoría, segundas viviendas con vistas al mar en un terreno privilegiado a solo 10 minutos del centro de la ciudad.
Pese a las manifestaciones de dichas familias, el equipo y la maquinaria ya se encontraban al interior de la toma, derribando portones y rejas de madera que habían instalado bajo el nombre de comunidad ecológica.
En ese sentido, un residente manifestó que la fiscal solo les notificó de desalojo. “Ya se acercó la fiscal y nos dijo, o sea, una notificación. Yo no he firmado nada, ella se acercó a mí y ella nos dijo, te notifico que tienes que salir, no hay nada por escrito, ni mi nombre, ni RUT. Yo no he firmado nada, no me han dado una solución y estoy quedando en la calle”.
Los terrenos de ADISA
Por su parte, la empresa dueña del terreno ADISA le pidió a las autoridades que posterior al desalojo mantenga una fiscalización activa, para que el sector no sea tomado nuevamente por estas familias.
En ese sentido, el abogado de dicha compañía, Raúl Castro, sostuvo que “hay que hacer cumplir y recuperar la autoridad en el país. No puede ser que personas que se arroguen diciéndose medioambientalistas, se toman un terreno donde el problema es ese y donde no se pueden hacer grandes inversiones porque aún hay instancias por resolver”.
Por último, detalló que las labores de desalojo se podrían extender hasta este jueves, momento en que las autoridades y dueños del terreno esperan concretar el cierre de manera definitiva.