La Unión Europea y Chile firmaron este martes un memorando de entendimiento (MoU) para profundizar la cooperación en el campo de las cadenas de valor de materias primas sostenibles que son necesarias para la energía limpia y la transición digital de ambos socios.
«Tenemos ideas afines, compartimos los mismos valores y somos socios elegidos para convertirnos en actores globales clave en la energía limpia y la transición digital», afirmó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que presenció la firma del acuerdo de asociación junto al Presidente Gabriel Boric.
Rubricado por el comisario europeo de Mercado Interior, Thierry Breton, y por el ministro de Exteriores de Chile, Alberto van Klaveren, este memorando de entendimiento también pretende desarrollar una industria competitiva y sostenible.
Esa industria se centrará en «el procesamiento de materias primas y valor agregado local en el sector minero, creando empleo de calidad y un crecimiento económico sostenible e inclusivo, en beneficio mutuo de ambas partes», destacó el Ejecutivo comunitario en un comunicado.
La nueva asociación gira en torno a cinco áreas que van desde la integración de cadenas de valor de materias primas sostenibles, incluso a través del desarrollo conjunto de proyectos, nuevos modelos de negocios, promoción y facilitación de vínculos comerciales y de inversión; hasta la cooperación en investigación e innovación a lo largo de las cadenas de valor, incluido el conocimiento de los minerales y la minimización de la huella ambiental y climática.
También incluye la cooperación para aprovechar los criterios ambientales, sociales y de gobernanza y alinearse con los estándares internacionales; así como el despliegue de infraestructura dura y blanda para el desarrollo de proyectos, minimizando su impacto ambiental y climático.
El último punto del memorando tiene en cuenta el fortalecimiento de capacidades, educación y formación profesional y desarrollo de habilidades a lo largo de cadenas de valor sostenibles de materias primas de conformidad con las normas internacionales del trabajo.
Como próximo paso, la UE y Chile se han comprometido a desarrollar una hoja de ruta operativa que incluirá acciones concretas de cooperación que llevarán a cabo las partes interesadas de los Veintisiete y del país sudamericano.
Esa hoja de ruta contará con el apoyo de la agenda de inversión del plan europeo Global Gateway, al que la UE dedicará 45.000 millones de euros para América Latina, según anunció ayer Von der Leyen.
Las materias primas críticas y estratégicas, que Chile posee en abundancia, son indispensables para un amplio conjunto de sectores estratégicos, incluida la industria sin emisiones, la industria digital, la industria aeroespacial y la defensa.
Desde la guerra de Rusia en Ucrania y las tensiones con China, la UE está creando nuevas alianzas estratégicas con terceros países ricos en recursos para tratar de mitigar los riesgos en sus cadenas de suministro para mejorar su resiliencia económica, al tiempo que logra sus objetivos climáticos y digitales.
Este acuerdo refleja «la ambición de Europa de diversificar y asegurar el suministro de materias primas críticas, complementando una serie de acuerdos similares concluidos con otros socios de ideas afines en los últimos años, señaló el comisario Bretón.
La Comisión ya ha establecido asociaciones estratégicas sobre materias primas con Canadá (junio de 2021), Ucrania (julio de 2021), Kazajstán, Namibia (noviembre de 2022) y Argentina (junio de 2023) en nombre de la UE.
Reunión entre gremios empresariales y negociador del acuerdo con la UE
La comitiva empresarial que acompaña al Presidente Boric en la gira también ha tenido agenda paralela. La Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) y la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) se reunieron con Paolo Garzotti, jefe negociador europeo del acuerdo de asociación concluido en diciembre pasado con Chile.
“Lo que buscamos fue conversar sobre este acuerdo que prontamente debiera aprobarse en Europa y luego en Chile, porque tiene implicancias importantes de comercio entre ambas economías», comentó Susana Jiménez, vicepresidenta de la Confederación de la Producción y del Comercio -gremio del gran empresariado chileno- y otrora ministra de Energía de Sebastián Piñera.
«En el caso de Chile esto va a permitir el ingreso de más productos (al Viejo Continente). Prácticamente el 99,6% de nuestros productos exportados entrarían con preferencias arancelarias a Europa y, por lo tanto, constituye un hito importante de profundización de nuestros lazos comerciales», resaltó la líder gremial.